ISAIAS 51,12: Yo, yo soy tu consoloador. ¿Quién eres tú para temer a un mortal, a un hombre que será como hierba?

Como anunciar el evangelio y como recibir el evangelio

Charla grupo julio 11 de 2013

Mas que pretender presentar una robusta metodología para la evangelización, lo que se quiere presentar son algunas recomendaciones importantes, basadas en las mismas escrituras y en la experiencia, que son útiles a la hora de hablar de Dios y de su plan de salvación en Jesucristo.

Se hablará al mismo tiempo de cómo anunciar y cómo recibir porque en nuestra vida siempre podemos estar como anunciantes u oidores de la palabra de Dios y los mismos criterios se deben usar en ambos lados.

La intención no es con estas recomendaciones afilar nuestro dedo acusador y señalador frente a las autoridades que Dios nos ponga en el camino para evangelizarnos, más bien es para mirar con misericordia y filtrado por las escrituras, los mensajes que recibamos acerca de Dios y de la salvación en Jesucristo.

Primero es necesario tener clara la definición de evangelio: buena noticia, buena nueva. Una buena noticia se caracteriza por:

  •  Debe traer alivio, alegría y gozo a quienes la escuchan
  •  Debe quitar el peso, la zozobra o la duda que noticias anteriores hayan dejado
  •  Debe presentarse con alegría, sin vergüenza y a todos los que pueden ser beneficiados de ella

Roles equivocado al anunciar el evangelio:
  • Pretender ser Juez de mi prójimo.
  • Pretender ser acusador de mi prójimo.
  • Pretender ser quien los está salvando o que estamos haciendo un favor.
  • Pretender en mis fuerzas escribir el mensaje en sus corazones
  • Pretender tener fe por ellos o tomar la decisión de fe por ellos.
  • Pretender ser maestro.

El espíritu santo acompaña la evangelización
  • 1 Corintios 3:5-7 ¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor. Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento. 

Permitirse ser guiado por el espíritu Santo

  • Mateo 10:19-20 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar. Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.


Cuál es la buena noticia?

Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Romanos 10:8-9 Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.

Juan 16:6-11 Antes, porque os he dicho estas cosas, tristeza ha llenado vuestro corazón. Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. De pecado, por cuanto no creen en mí; de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más; y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado. 

San Marcos 11:22 Jesús contestó: —Tengan fe en Dios. Por eso les digo que todo lo que ustedes pidan en oración, crean que ya lo han conseguido, y lo recibirán.

Herramientas para anunciar el evangelio:

  • Palabra de Dios
  • Testimonio
  • Vida Diaria
  • El testimonio de otros

El objetivo de anunciar el evangelio no es
  • Parecer bueno o espiritual
  • Resaltar sobre un grupo o generar influencia sobre él
  • Que la gente cambie de religión
  • Defender una denominación
  • Obtener riquezas o favor de la gente
  • Tener grandes congregaciones
  • Vender artículos o reliquias
  • No es agradar al mundo
  • Para obtener a cambio el favor de Dios

Cuál es el objetivo de anunciar el evangelio:
  • Que la gente se reconcilie con Dios a través de Jesucristo, que lo reconozcan como su señor y salvador,  vivan su cristianismo con el apoyo, el poder y amor del espíritu santo actuando en nosotros mismos y que este fe los mueva a actuar en amor para con su prójimo.
       Realizado por:
       Juan David Vélez.