La libertad del evangelio

Charla grupo Agosto 8 de 2012

En la última charla hablamos de renovar nuestra mente, de cambiar muchas cosas que hemos aprendido, dejando todo lo viejo y lo pasado atrás y empezando una vida nueva con Dios, hemos notado que muchas de las preocupaciones que tenemos pueden radicar en  miedos de no poder cumplir con todo esto, de fallar, y de cambiar muchas cosas que nos gustan pero que sabemos que a Dios puede no agradarle, tienen miedo de la transición, por esto hoy quisimos traer como tema la LIBERTAD DEL EVANGELIO, un tema que constara de dos puntos.  

    1.    Cada una de las cosas que Dios nos pide o nos enseña constituye una verdad, y esa verdad derrumbará todo conocimiento o percepción que teníamos en nuestra mente sobre las cosas, situaciones de la vida, incluso la verdad de Dios está por encima de lo que muchas veces sentimos; en ese orden de ideas la verdad nos hace libres de nosotros mismos de nuestro pensamiento y sentimientos, y nos permite día a día en que la vamos conociendo tener la mente de Cristo y el poder y la autoridad del espíritu santo.

    2.    Todos los mandatos, leyes o principios divinos fueron creados o establecidos a nuestro favor, cada uno de ellos viene con buen fruto y con promesas de Dios para nuestras vidas.

Dice el Señor Jesús:

“si anduviereis en mis decretos y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra rendirá sus productos, y el árbol del campo dará su fruto. Levítico” 26:3-4

Gálatas 6:7-10  (Lo que siembras eso cosechas)

6:7 No os engañéis; Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará,

6:8  porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.

6:9  No nos cansemos, pues, de hacer bien, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.

6:10  Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y especialmente a los de la familia de la fe.

“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia” Isaías 41:10.

Mantener los ojos en la meta: “que el que comenzó en vosotros la buena obra,  la perfeccionará hasta el día de Jesucristo” Filipenses 1: 6 

Si bien es cierto,  Dios es quien gobierna todo y quien permite o no todo.

Obrar de acuerdo al Evangelio, es lo que nos hará feliz en el cielo y en la tierra,  porque no hay nadie que sea más feliz que aquél quien lleve a Cristo en lo mas profundo de  su corazón y conozca desde muy adentro el valor significativo que tiene para su vida que Cristo murió por él y que todos sus pecados pasados, presentes y futuros ya fueron perdonados.

Quien no actúe de acuerdo al Evangelio  su infelicidad ya comenzará desde esta vida terrena porque Dios nos dejo su palabra para la salvación de nosotros porque fue la palabra inspirada por Dios quien es el Padre y el creador.

Dios nos dejó su palabra para que la leamos, la vivamos, la interioricemos, la recibamos, la prediquemos y nos permitamos ser usados por Nuestro Señor Jesús y llevar sus enseñanzas a la practica de nuestra vida cotidiana.

Cuando llevamos el nombre del Señor, es Dios quien nos eligió y nos destino para que  demos fruto pero ese fruto nace es del Señor, nosotros  permitimos ser usados por El Padre; antes de llevar sus enseñanzas y   vivirlas orémosle al Padre para  que venga el Espíritu de la verdad que nos guiará hasta la verdad plena. Juan 15; 5-6.

El evangelio no se vive como cumplir mandamientos, delante de Dios no se tiene que cumplir porque no se satisface nada, solo en amor se satisface, lo esencial esta en la contemplación de  vivir con el Señor, lo esencial esta en el alma y cuando tu vives el evangelio con amor te sientes libre de lo que pueda pasar para ti o para los demás y te sentiste satisfecho de lo que hiciste en el nombre del Señor.

Cuando vivimos o llevamos el evangelio a la practica de nuestra vida debemos sentirnos libres de cargas que nos afligen o nos cuestionan;  cuando vemos sus respuesta nos sentimos felices, llenos, contemplados y cuidados,  pero cuando no vemos lo queremos o no tenemos respuesta por lo que tanto hemos orado debemos sentirnos libres de lo que Dios Padre quiera hacer, mostrarnos o enviarnos,  porque al obedecer en la fe nos estamos sometiendo libremente a la palabra escuchada, porque su verdad esta es garantizada por Él,  Abraham es el modelo que nos propone la sagrada escritura  por la fe, Abraham obedeció y salió para el lugar que había de recibir en herencia, y salió sin saber a dónde iba; por la fe recibió Noé aviso de lo que aun no veía y cauteloso construyo un arca para que salvase su familia.  

Oír, Guardar y Hacer… y te amará, te bendecirá y te multiplicará.

·       Deuteronomio 4:40:  Y guarda sus estatutos y sus mandamientos, los cuales yo te mando hoy, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y prolongues tus días sobre la tierra que Jehová tu Dios te da para siempre. 

·         La libertad está en hacer su voluntad:

1)     Oír Su voluntad.

2)     Guardar su voluntad.

3)     Poner por obra su voluntad.
Romanos 2:13  Pues no son justos ante Dios los que solamente oyen la ley, sino los que la obedecen

Santiago 1:22  Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.

Cuando alguien pide algo se está esperando que le cumplan, al no hacerlo parece que hicieron oídos sordos cuando se les solicitó el favor o tarea, y sí tenemos oídos sordos a las palabras, desde luego que nunca haremos lo suyo. Es esta la problemática a la que Dios se refiere una y otra vez en las Escrituras, le pide una y otra vez al pueblo: escucha, guarda y pon por obra.

Dios asegura que nos irá bien, que es lo que todos queremos que pase en nuestra vida, pero Dios lo promete en su palabra, nos pide seguirlo para Él poder hacerlo y no lo hacemos!.

·         Jeremías 6:16 Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos.

Sí miramos a nuestro pasado y vemos las equivocaciones daríamos mucho para que alguien venga y nos diga por donde y como debemos andar, pero en la sencillez de Dios. Él llega y nos toca la puerta y no queremos seguirle.

Sí hay equivocaciones en su caminar, pero tenemos arrepentimiento verdadero, será perdonadas nuestras equivocaciones:

·         Hebreos 8:12 Porque seré propicio a sus injusticias,
Y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus iniquidades.

·         1Juan 1,9
   Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. 

·         Hebreos10:17-18.añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.
Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado. 

Realizado por:

Jhoana Díaz.   Isabel Villegas.   Mónica Villegas.